Dicen que tener paciencia es una virtud, pero este no es el caso para Olaf Mortensen, que no puede esperar a que el buenorro Jeroen Mondrian cuelgue el teléfono para comerse su verga gruesa y venosa. Comienza a mamársela lentamente y luego con mas fuerza, lo que hace que Jeroen quiera metérsela donde más le gusta, bombeando con fuerza y con un final muy bueno, con el culo de Olaf lleno de leche, por dentro y por fuera.

OBTEN 2 MESES AL PRECIO DE UNO CLICANDO AQUÍ

por Belami

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *